Últimamente hemos hablado mucho sobe cómo la tecnología se ha convertido en el motor detrás de la transformación económica y productiva de muchas industrias. México, como uno de los principales hubs de manufactura a nivel global y un mercado en constante expansión en el sector retail, enfrenta el reto y la oportunidad de aprovechar las nuevas tecnologías para mejorar su competitividad. En lo personal, la cadena de suministro es el mejor ejemplo cuando el tema se trae a la mesa.
Implementar tecnología en la cadena de suministro no solo aumenta la eficiencia, sino que fortalece la economía, mejora la productividad y reduce costos operativos. El caso de la industria manufacturera es ineludible, pues es uno de los pilares de la economía mexicana, ya que representa alrededor de 18% del PIB y genera millones de empleos.
No obstante, es claro que enfrenta retos en términos de productividad, costos y competencia internacional. Aquí es donde la tecnología entra en juego. Desde la adopción de robótica avanzada hasta el uso de inteligencia artificial (IA), las empresas manufactureras en México están comenzando a ver cómo estas herramientas transforman su forma de operar.
La automatización está siendo cada vez más explorada con tecnología como machine tending, que incorpora robótica en celdas de producción para asegurar procesos continuos de producción. Pero más allá, en términos de la comunicación con los proveedores y los clientes, los fabricantes están conectando todas estas operaciones a la generación de órdenes de compra, de producción y control de inventarios. En este sentido, a pesar de llevarse a cabo en diversos sites, la manufactura se unifica a lo largo de la cadena de valor.
La robótica entra en juego
Otro ejemplo de la expansión de la tecnología en las cadenas de suministro en México tiene que ver con los centros de distribución. Un caso concreto es la implementación de robots en los centros de distribución como el de Walmart, donde se utilizan cada vez más robots diseñados para manejar inventarios, mejorar la precisión en la clasificación de productos y reducir costos operativos.
En algunos centros de distribución, la capacidad se ha duplicado gracias a la automatización, lo que ha permitido tiempos de entrega más rápidos y una mayor eficiencia. Este tipo de iniciativas no solo aumenta la competitividad de las empresas, sino que también genera un impacto positivo en la economía al hacer que los productos lleguen a los consumidores de manera más eficiente.
Otro caso relevante es la expansión de Amazon México, que ha adoptado robots en sus centros de almacenamiento y está explorando el uso de drones y vehículos autónomos para la entrega de última milla.
Estas tecnologías están revolucionando la logística y reduciendo significativamente los tiempos de entrega, lo que genera una mejor experiencia para el consumidor final. Además, el uso de IA para gestionar inventarios en tiempo real y optimizar rutas de entrega no solo mejora la eficiencia operativa, sino que también reduce el impacto ambiental, una preocupación creciente en la industria.
El retail y la logística de última milla
El sector minorista también ha mostrado una evolución vertiginosa, impulsado, sobre todo, por el auge del comercio electrónico y las crecientes expectativas de los consumidores. La tecnología ha jugado un papel fundamental en la modernización de este sector, particularmente en lo que respecta a la logística de última milla, un eslabón clave para el éxito en el retail.
Muestra concreta es el uso de IA para la optimización de rutas de entrega, que permite a las empresas reducir costos y mejorar los tiempos de entrega. Walmart, por ejemplo, ha implementado algoritmos de IA que optimizan sus rutas de entrega, lo que ha resultado en una reducción de 30 millones de millas recorridas innecesariamente y una disminución de 94 millones de libras de CO2 emitidas (el tema del medio ambiente y la tecnología es otro que amerita una colaboración por separado).
La adopción de vehículos autónomos y drones, ofrecen soluciones innovadoras para los desafíos de la entrega de última milla que, aunque en México, aún está en fases piloto, su adopción masiva podría transformar muy pronto la forma en que las empresas manejan sus envíos y mejorar la accesibilidad a productos en áreas rurales o de difícil acceso.
Modernización: un llamado a la acción
A pesar de los avances ya mencionados, la adopción de tecnología en la cadena de suministro en México todavía enfrenta barreras. Muchos actores de la industria, especialmente pequeñas y medianas empresas, pueden ver estos desarrollos como inversiones costosas o riesgosas.
Sin embargo, como señalan estudios realizados por el Centro de Investigación en Logística y Cadena de Suministro del ITESM, la implementación estratégica de tecnologías puede generar retornos sustanciales, incluso en el corto plazo. Desde una mejor administración de inventarios hasta la reducción de costos operativos y la mejora en la experiencia del cliente, los beneficios son tangibles.